POR EL PAPEL

ESTOS TORITOS YA NO ESTAN NADA VERDES

Chicago, con el técnico de la Cuarta y un equipo con muchos juveniles, le ganó al puntero Sarmiento. Tuvo actitud y ratos de buen fútbol. La figura: Scifo, un pibe.

La parada era complicada por varios factores: tres partidos sin conocer la victoria (2P y 1E), un técnico interino con pocos días de trabajo, y sobre todas las cosas, porque tenía delante al puntero de torneo, Sarmiento. Sin embargo, Chicago puso en cancha a siete pibes del club (menos Solaberrieta, Barbosa, Césaro y Gigena) que frenaron al Kiwi y dejaron en claro que están más vivos que nunca.

Se podría decir que la clave de la victoria se forjó desde atrás hacia delante porque Melián, el nuevo DT, decidió utilizar una línea de cuatro que como punto más alto lo tuvo a Joel Barbosa, fundamental para dar indicaciones y luego para subsanar los errores de Trombetta por la banda izquierda. Luego, en la mitad de cancha, reapareció Adrián Scifo y fue lo más alto del equipo, como conductor que hizo jugar al resto de los volantes. Y arriba, Martinuccio fue lo más parecido a Caniggia porque el punta fue como un pájaro que anduvo detrás de todas las pelotas y, además, dio los dos pases gol. Mientras todo esto sucedía, el visitante hacía agua en la cancha. El equipo de Marceo Lippi no encontraba la vuelta al partido y su jugador más explosivo, Matías Fishcer, se iba a los 31 minutos por un corte en la frente.

Para el complemento, el loca ya era una aplanadora y tenía todo para llevarse la victoria, pero un error del debutante Domínguez (cabeceó de palomita una la pelota tras un centro del 11 y la metió en su propio arco) le dio al Kiwi la chance de llevarse la victoria a Junín. Pero en siete minutos, el Torito (más Torito que nunca) dio vuelta el partido. Primero con el gol de Scifo y luego con un cabezazo de Gigena.

Chicago bajó el líder, con un gran juego colectivo, actitud y ratos de buen fútbol. Quizás entonces sea el momento de los jóvenes para levantar al Toro.


Fuente:ole