miércoles, 15 de abril de 2009

PRIMERA B / CHICAGO 0 - COLEGIALES 3

El payaso mala onda
Dos tantos de Molina pusieron de mal humor a Chicago, que quedó a seis del Tano y sin festejos por el cumple del barrio. Cole fue eficaz.

Resignados se fueron los hinchas de Chicago, no era para menos ya que el Torito jugó su peor partido del torneo, justo en el desenlace del mismo, cuando no hay margen para el error. Y los errores abundaron en el local y Colegiales aprovechó uno tras otro, con el Payaso Molina como principal actor de una fiesta Tricolor, en el día en que el barrio de Mataderos alcanzó el 120° aniversario de su fundación...

A los 30 segundos del inicio, Díaz remató desviado sin resistencia de los volantes locales. Esa primera jugada del encuentro dejó en evidencia que el conjunto de Munro quería conseguir una victoria de visitante después de diez partidos. Y esa desatención de los futbolistas del Verdinegro fue una constante durante la tarde. Es que fue llamativo la pasividad de un equipo que está peleando el ascenso, hoy con menos chances. Ante este panorama, Orsi, enganche de la visita, recibió sin marca, obvio, y remató de media distancia, De Olivera la desvió para su derecha, Torres durmió a toda la defensa y la mandó al corazón del área y Molina, con el muslo derecho, la empujó. Gol y primera lanza clavada al Toro.

El pomo y la matraca de Molina volvieron a entrar en acción cuando a los 26', Barbosa dejó corto un pase y el 9 de Cole se la llevó y desde afuera del área la metió abajo contra un palo. Golazo y mucha mala onda en Mataderos, más cuando ni en el equipo ni en el banco había reacción ante una presentación lamentable, con Césaro y Cigno como ejes de la imprecisión. Sólo unos trepadas de Distéfano y la dinámica de Martinuccio llevaron peligro al arco de Zarza.

En el ST, los dirigidos por Ferraresi estuvieron relajados, jugando muy buen fútbol. Además Melián tardó en apostar con Ruiz y Enríquez. Cuando había algunos indicios de un envión, Barbosa intentó desviar un centro y la clavó por detrás de De Olivera, increíble. Una fiesta para Cole, que acumula tres éxitos en cuatro partidos, amplia decepción en Chicago, que quedó lejos del Tano.

FUENTE:OLE